martes, 18 de octubre de 2011

Crédito fácil, deuda mortal.


Me llega a mi conocimiento personal, que una empresa de estas que facilitan el crédito, puede llegar a cobrar hasta un 30% de intereses (30% TAE). Estoy seguro de que existirán casos más graves que este, pero ha sido suficiente para que me lleve las manos a la cabeza.

Ya en la antigua Grecia, donde la economía no existía como tal pero en donde (obviamente) la economía seguía igual de viva que ahora,  los filósofos se preguntaban y debatían sobre cuestiones políticas y comerciales. Aristoteles, reconocido filósofo del que no creo que haga falta introducción, llegó incluso a concluir que cualquier tipo de interés se debía considerar usura.

Más tarde se relajó el asunto y se consideraba que era permisible cobrar un interés si era por motivo de coste de oportunidad.

Es decir, si yo tengo 100 euros, y debo renunciar a consumir hoy 40 para dejártelos a ti, tengo derecho a cobrarte algo porque me estás privando de un bienestar que quería conseguir en el presente (el interés será por tanto, la elasticidad de substitución entre consumo presente y futuro, si te da igual cuando consumir prestarás al 0% de interés). Se penalizaba, por tanto la ganancia de utilidad o bienestar con el cobro de interés.

Ganar dinero mediante el dinero era algo no muy bien visto. Incluso Aristóteles veía mal el comercio que no fuera necesario para trasladar bienes de un sitio a otro (supongo que se referiría a minoristas).

Claro que estoy hablando únicamente del “pensamiento económico” no de cómo se regulaba el cobro de un interés, de eso particularmente no tengo ni la menor idea. Sí de cómo es actualmente.

Supongo que los defensores del libre mercado me dirán que quien coge un crédito con un 30% sus motivos tendrán y que la culpa es de aquel que lo acepta.

Pero yo entonces tendría que decir que, desde luego, en una negociación en el que el poder de la misma lo tiene una única persona, no es una negociación loable, ni debería ser legal. Porque no nos vayamos a lo “teórico”. El que pide esta clase de dinero es “porque lo necesita”. Eso incluye un tiempo de urgencia, del que se lucran muchas de estas entidades, elemento que se suma a la ignorancia económica de muchos de los contratistas y el secretismo de muchas de las entidades.

Así que sí, veo normal que se cobre un interés por prestar un dinero y dejar de tenerlo. Bajo el esquema bancario, sí, también, veo normal que se cobre un interés encontrado bajo un mercado que suma necesidades de ambos y poder de todos, pero no, no entiendo que existan entidades que su beneficio provenga, exactamente, de la mala situación, la ignorancia o la urgencia de unas personas que no tienen con qué defenderse.

Y es tan simple como prohibir todo aquel interés que sobre pase en un tanto % a uno de referencia como, por ejemplo, el Euribor. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario